La inteligencia emocional aplicada al emprendimiento es una herramienta útil que no debemos perder de vista. Esta es hoy más importante que nunca, razón por la cual es importante conocer cómo funciona y cómo trabajarla.

Los emprendedores tienen que tener claro que crear y mantener una empresa dependerá tanto de los conocimientos profesionales, como de la inteligencia emocional.

¿Qué es la inteligencia emocional?

Esta puede definirse como la capacidad de reconocer, entender y manejar las emociones ante diferentes circunstancias. Pero, no solo eso, también abarca poder reconocer, entender e influir en las emociones de los demás y darse cuenta de cómo estas afectan a cada persona a nuestro alrededor.

Esta capacidad puede ser innata, pero también puede trabajarse empleando diferentes técnicas e instrumentos.

Una de las partes más importantes es conocer nuestras propias emociones para evitar que influyan en nuestro comportamiento de forma negativa. Y al mismo tiempo, identificar y entender las emociones de los que nos rodean para interpretar su forma de actuar.

Por tanto, esta habilidad sirve para tener un mejor manejo de las emociones y relaciones.

¿Por qué es importante para los emprendedores?

Los emprendedores, al igual que muchos otros profesionales, son a menudo víctimas de sus propios impulsos y se dejan llevar por sus emociones a la hora de emprender un negocio. Por esa razón, aprender a identificar esos impulsos es fundamental para analizar cada circunstancia y tomar decisiones coherentes.

Además, puesto que los equipos son todo a la hora de emprender , es importante tener en mente que el líder deberá coordinar y motivar, siendo esencial identificar las emociones de otras personas. Uno de sus principales propósitos debe ser mantener motivado al equipo para asegurar su rendimiento y lograr así, los objetivos de la compañía.

Lanzar un emprendimiento, mantenerlo y lograr que sea competitivo no solo depende de una planificación eficiente, una buena inversión y conocimientos profesionales. Por tanto, al igual que cualquier profesional del sector, los emprendedores deben combinar las habilidades duras con las habilidades blandas, o soft skills, y esto solo se consigue trabajando la inteligencia emocional.

Claves para trabajar la inteligencia emocional

Hay cinco dimensiones que consideramos imprescindibles para la inteligencia emocional: autoconocimiento, autorregulación y control, automotivación, empatía y habilidades sociales. Las tres primeras son dimensiones intrapersonales, es decir, hacen referencia a las aptitudes que promueven la toma de conciencia y nos ayudan a gestionar nuestras propias emociones. Y las últimas dos, en cambio, corresponden a la aptitud social, es decir a las aptitudes que determinan el manejo de las relaciones con los demás

Toma nota de cuáles son y trabájalas para convertirte en un emprendedor exitoso que además, motiva y cuida de su equipo:

1. Autoconocimiento

Esta dimensión nos ayuda a percibir qué sentimos en cada momento, es decir conocer nuestros propios estados internos, preferencias, recursos e intuiciones, y utilizar esas preferencias para orientar las tomas de decisiones. El objetivo es tener una idea realista de nuestras habilidades, fortalezas y debilidades.

2. Autorregulación o control de nosotros mismos

Hace referencia al manejo de las emociones y aborda entre otras, la gestión de la frustración y el estrés.

3. Automotivación

Debemos utilizar nuestras preferencias, recursos e intuiciones para avanzar hacia los objetivos que nos hemos marcado. Es el momento de tomar la iniciativa y perseverar frente a los contratiempos y las frustraciones. La automotivación nos ayudará a abordar el trabajo con gran entusiasmo, enfrentando los retos con un alto grado de iniciativa y compromiso, y luchando por la consecución de los objetivos de forma optimista.

4. Empatía

Percibir lo que sienten los demás, es decir, la captación de sentimientos, necesidades e intereses ajenos y ser capaces de ver las cosas desde su perspectiva. Cultivar la afinidad nos permitirá rodearnos de gente muy diversa y adquirir popularidad y reconocimiento social.

5. Habilidades sociales

Habilidad para manejar bien las emociones en una relación e interpretar adecuadamente las situaciones y las redes sociales. Estas nos servirán además para dirigir y liderar, negociar y resolver problemas y para lograr la cooperación y el trabajo en equipo.